Todos los secretos del latigo bdsm

Látigo BDSM

Detrás de la látigo sadomasoquista hay un mundo real, un universo hecho de curiosidades, diferentes tipos de disfrute, técnicas para usar un mismo instrumento y también mucha, mucha historia, incluso de los orígenes más antiguos y arcaicos.

Pero empecemos por el principio: ¿Qué es el látigo sadomasoquista?

Evidentemente nos referimos a un complemento ideal para la sumisión, para el fetichismo y las técnicas BDSM, pero también amado por quienes nada tienen que ver con estas corrientes eróticas.

El látigo sadomasoquista, también llamado látigoes un palo más o menos largo fabricado en su mayoría de fibra de vidrio o plástico recubierto de cuero, tela ecopiel u otros materiales similares.

El látigo sadomasoquista seguirá teniendo connotaciones estilístico que hacen referencia al mundo del fetichismo y el BDSM, así que vete, vete libre hasta para tachuelas, detalles oscuros, etc.

Imaginemos que sabes, al menos aproximadamente, qué tipo de atractivo tiene una persona accesorio sexy o una prenda de vestir que guiña un ojo a estas corrientes calientes. El látigo sadomasoquista también se caracteriza por varias partes fundamentales:

  • la manija;
  • un terminal de rizo o anillo;
  • una cuerda, una lengüeta de cuero o un cordón según el modelo, o más hilos de tela final, que se anclan al mencionado rizo, y que constituyen el término final del látigo.

Este terminal es el que literalmente será azotado en el cuerpo de quien sufra la acción, y en el mercado encontrarás muchos modelos de látigo sadomasoquistacada uno capaz de proporcionar sensaciones diferentes, más allá de la fuerza con la que se imprime el latigazo.

También subrayamos que también las formas del mango, el palo, el cuerpo del látigo sadomasoquista pueden ser diferentes, algunos, por ejemplo, pueden tener un mango de cuero, esto para garantizar un agarre decididamente más firme y seguro durante el uso.

precio de látigo bdsm

En general, el látigo sadomasoquistaademás de trivialmente el cinturón del pantalón que también es muy utilizado en el fetichismo y el BDSM, el accesorio de azotes debe tener dos elementos distintivos:

  • la manija;
  • el golpeador

Esta última es fundamental y es la parte que en realidad da bofetadas, de hecho to slap, en inglés, significa abofetear.

El látigo sadomasoquista es para muchos el verdadero símbolo del sadomasoquismo, fetichismo y BDSM y como culparlo!?

Es la herramienta que mejor encarna la filosofía que une estas duras macrocategorías, el látigo en efecto produce dolor pero también placer, recuerda el gesto de castigar, de dominar a otro ser humano.

Sin embargo, recuerda que en todas estas prácticas, que deben seguir siendo juegos eróticos y no algo más, las consignas son siempre: jugar y practicar. sano, seguro y consensuado.

Cómo usar un látigo sadomasoquista

Aquí tenemos muchas ganas de abrirte un mundo y más que contarte técnicamente paso a paso como si fuera un manual de usuario como usar el látigo sadomasoquista queremos hacer más.

A continuación encontrará en detalle muchos consejos sobre el tema y que le harán comprender cómo disfrutar con esta herramienta única de dolor y placer en la mano y con una historia antigua.

El látigo sadomasoquista, hoy en día, es el rey indiscutible en las prácticas, o rituales fetichistas, se practica el BDSM y en particular con esta herramienta el llamado pony-play.

Entonces, claramente cada uno lo inserta en sus propios rituales íntimos a voluntad, de hecho, puede usarse en juegos difíciles que implican flagelación.

El látigo sadomasoquista es uno de los accesorios calientes más adecuados para aquellos que se acercan al mundo BDSM, o incluso sadomasoquistas, esto se debe a que el flogger o látigo es particularmente inofensivo, sobre todo si no se usa indebidamente o impartiendo fuerzas absurdas.

Piénsese, por ejemplo, que el látigo de nueve colas, o en todo caso los de muchos flecos como se ve también arriba en la descripción, hacen más ruido que daño.

Se dice entre los expertos que el látigo sadomasoquista es una herramienta que, más que causar un gran dolor y consecuentemente placer, es un accesorio que actúa mayoritariamente a nivel erótico-psicológico y ese es su secreto.

Sí, muchas veces es más la imaginación, la idea de ser sumiso lo que desencadena la excitación, lo que estimula el eros, el goce.

Psicólogos y sexólogosal unísono, dicen que esa sensación de gran excitación proviene del estado de tensión, de peligro que se provoca durante estas prácticas fetichistas, BDSM, sadomasoquistas.

El sujeto es sumiso, miedoso, no sabe lo que le espera y todo esto lo excita o al menos aumenta el estado erótico general.

Por lo tanto, no es necesario elegir látigos bdsm que necesariamente producen un dolor excesivo, a menudo también es su forma la que sugiere un sufrimiento extremo, pero en realidad se trata aquí de un juego psicológico casi ilusorio.

¿Un truco del oficio? Haga disfrutar a su pareja evitando ser predecible, por lo que varíe la intensidad del azote con frecuencia, palmee las partes más diferentes de su cuerpo, también use alternativamente sus manos, o el pene si es el hombre quien va a azotar, etc.

¿Y entonces? Bueno, al principio es mejor empezar con trazos ligeros hechos con el látigo sadomasoquistaluego aumentar gradualmente el ritmo, pero ciertamente mantener abierto el diálogo con el compañero y fijar una palabra de salvación, que utilizará cuando quiera detener el juego.

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¿Alguna curiosidad sobre el látigo sadomasoquista?

Demos muchos pasos en la historia e investiguemos. los orígenes del látigo sadomasoquista.

Ya existen algunas huellas en la época de los antiguos egipcios, cuando las imágenes mostraban los cetros de los faraones.

Estos eran flagelos reales llamados nekhekhs. En particular, entonces había una deidad que a su vez tenía el flagelo como cetro, el Dios Abraxas, caracterizado por la cabeza de un gallo y también adoptado por los antiguos griegos y romanos.

Era un símbolo indiscutible de gran poder, y se puede ver que incluso originalmente el látigo tenía esta connotación, basta pensar en el que usaban los pastores, los que conducían el carro, etc.

Pero en todas las épocas, incluso antes y después de la moderna, tuvo sus símbolos de poder y de látigos bdsm hoy provienen de tradiciones de poder arcaico y por tanto de sumisión.

Cómo usa el látigo sadomasoquista: precauciones y consejos prácticos

Aquí se explica cómo hacerlo en detalle. Sigue este decálogo y tus momentos eróticos serán más que satisfactorios y excitantes con tu nuevo látigo sadomasoquista.

  • Evite azotar la cara, el cuello, la cabeza, la columna vertebral y la parte superior de la pelvis, son partes prohibidas especialmente para aquellos que son principiantes, si habla con una amante o un dueño experimentado, seguramente le dirá lo mismo. ;
  • azotar lentamente sobre todo en las partes iniciales como el dorso de las manos, pies, genitales, estas son zonas ricas en terminaciones nerviosas y no todos tenemos la misma resistencia, sobre todo si somos nuevos en estas prácticas nos podemos encontrar no completamente similar / adecuado;
  • no exageres con la intensidad del latigazo incluso en zonas como la cara interna del brazo o en las pantorrillas sobre todo si estás de pie, son zonas muy delicadas;
  • con el látigo sadomasoquista intenta practicar las llamadas cosquillas eróticas, usa los terminales de tu flogger, las coletas, etc.;
  • se puede utilizar una buena fuerza de latigazo en partes como muslos y glúteos, zonas que por su naturaleza están cubiertas por una mayor capa de grasa y por tanto también el dolor percibido es menor y los traumatismos por golpes y latigazos implican menos daño;
  • no azote las zonas de piel en proceso de cicatrización, quizás aquellas con abrasiones previas debidas a otros latigazos;
  • acostúmbrate a vestir siempre las áreas que van a tener hematomas, abrasiones, rasguños, desinfectar y poner una crema especial, obviamente después de haber limpiado bien el área;
  • Recuerda siempre las palabras clave de los juegos BDSM, fetiche y BDSM: el juego debe ser saludable, seguro, consensuado y buen sexo caliente con el látigo sadomasoquista.
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